El quehacer político debe ser algo más que la función de un burócrata, personaje que
gobierna desde un escritorio. Por lo mismo, es preocupante el grado de transformación que
han padecido algunos personajes de la 4T.
Podría dar nombres, pero es más importante resaltar los hechos con la intención de hacer un
llamado de atención al equipo de gobierno que se hará cargo de la administración estatal en
unas cuantas semanas más.
Entre los funcionarios actuales de la 4T hay personajes que conocí en los pasillos de la
Universidad de Sonora, personas con las que era común platicar y tener debates interesantes
sobre el porvenir político de la entidad. Al margen de que siempre se presentaban
diferencias en cuanto a nuestra visión de ese futuro que anhelábamos, persistía la idea de
que en caso de ser funcionarios se les podría exigir una comunicación permanente que nos
permitiera ser parte del ejercicio de gobierno.
Desafortunadamente, al tener el poder en sus manos y no saber qué hacer con esa
responsabilidad, decidieron seguir instrucciones antes que ofrecer soluciones. Por eso, de
pronto se abandonan dos luchas ciudadanas de defensa de áreas verdes, a nivel municipal,
argumentando los ahora burócratas, que quienes se están robando esas dos áreas verdes
están actuando “legalmente”. Es como decir que los Coppel se agenciaron “legalmente” los
terrenos del vaso de la presa donde construyeron su desarrollo habitacional exclusivo,
llamado Riberas del Pitic, creando un enorme lago privado, que de forma directa está
provocando que se seque el Humedal de La Sauceda. La burocracia federal de la 4T simple
y sencillamente no toma cartas en el asunto y permite que continúe el despojo de nuestras
áreas verdes.
El burócrata, que ha decidido darle la espalda al Pueblo, está más interesado en seguir
percibiendo su jugoso sueldo que asumir el riesgo de verdaderamente transformar el
quehacer político. Por eso, es común que se nieguen Audiencias y cuando se conceden se
busca imponer las decisiones que ya tomaron en sus oficinas. De persistir esta práctica,
nada bueno surgirá del nuevo gobierno.
Dicen, los allegados a Alfonso Durazo, que el candidato electo busca integrar a su equipo
de gobierno a personas con marcadas capacidades técnicas. No quiere “grillos”, esa fue la
expresión, y suena bien, pero se corre el riesgo de que se burocratice aún más el quehacer
político. Esto es, podría desarrollarse un gobierno muy parecido, guardando las
proporciones, al de Salinas de Gortari, tiempos en los cuales el equipo de gobierno estaba
integrado por personajes egresados de las universidades “mas prestigiadas” en el mundo
académico.
Dice el presidente que el Pueblo es sabio, y le creo, pero si no se recurre a ese Pueblo para
acordar las acciones de gobierno, seguirá prevaleciendo la burocracia sobre los intereses
más legítimos de la sociedad que pretende gobernar la 4T. Más aún, si esa burocracia se

asume como “experta” verán a los ciudadanos como ignorantes y, entonces, más que nunca
prevalecerá el poder del escritorio sobre el poder ciudadano.

Por Isabel Dorado Auz

Estudió en Universidad de Sonora. Promoción del 1990 Químico Biólogo en Alimentos. Guasave Ciudad de origen.8 de julio de 1967 fecha de nacimiento.

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